Ha sido concebido como un instrumento de ayuda a las unidades clínicas
de reumatología y de otras organizaciones sanitarias que deseen
mejorar su modelo clínico-asistencial adaptándolo a las necesidades de
las personas con enfermedades ERIMI.
Se recomienda leer estas instrucciones antes de realizar la autoevaluación
para obtener un mejor aprovechamiento de la herramienta.
1. Herramienta de autoevaluación
IEMAC ERIMI es una herramienta que permite la autoevaluación de
unidades clínicas de reumatología y de otras organizaciones sanitarias en
relación a su grado de implantación de modelos de gestión de las personas
con ERIMI. Mide la progresión de la unidad clínica de reumatología y de
otras organizaciones en su transformación hacia el abordaje integral de
las ERIMI de forma sencilla, y con sensibilidad suficiente.
El procedimiento de autoevaluación se completa usando una herramienta
informática de tratamiento de resultados del proceso de autoevaluación
disponible en el enlace www.iemac.es/erimi/
2. Ámbitos de aplicación y perspectiva de evaluación
IEMAC ERIMI puede ser utilizado en organizaciones meso (gestión de
organizaciones, centros y programas asistenciales) y micro (actividad de
los profesionales clínicos y pacientes).
IEMAC ERIMI propone y evalúa el grado de implantación de 30
intervenciones. Aunque algunas intervenciones puedan resultar más
próximas a la actividad de un profesional u organización determinados,
todas en su conjunto permiten una completa evaluación de los enfoques
y su despliegue en la práctica.
3. Estructura del cuestionario
IEMAC ERIMI está estructurado en 4 ejes y 30 intervenciones.
Cada intervención se debe evaluar teniendo en cuenta el contexto y
la realidad de la organización (unidad clínica de reumatología) que se
somete a evaluación, utilizando una escala de puntuación en rango de
0 a 100. La puntuación de cada intervención debe ir acompañada por
la descripción de las actuaciones concretas puestas en marcha que la
justifiquen. Las intervenciones cuentan con un texto de apoyo o glosario
en donde se describe algún concepto clave, el alcance de la intervención
o se citan ejemplos para facilitar la mejor comprensión de la intervención.
4. Proceso de autoevaluación
IEMAC ERIMI se ha ideado para ser autoaplicado mediante un proceso
de autoevaluación, si bien permite evaluaciones externas. Para conducir
la autoevaluación, es necesario contar con un equipo multidisciplinar de
autoevaluación compuesto por diferentes profesionales que, de forma
consensuada, respondan a las cuestiones planteadas en IEMAC ERIMI.
Se recomienda que el equipo de autoevaluación esté formado por
profesionales con diferentes perfiles y competencias de gestión de los
pacientes con ERIMI (reumatólogos, médicos de atención primaria,
enfermería de reumatología y de atención primaria, rehabilitadores,
fisioterapeutas, farmacéuticos de hospital, psicólogos, etc). Es
aconsejable que integre los distintos ámbitos asistenciales (atención
primaria, hospital), así como a otras especialidades médicas que
participen con frecuencia en el proceso de atención de las personas
con ERIMI y a proveedores de cuidados de atención social.
Con carácter previo a la reunión de evaluadores, es necesaria la
lectura del instrumento de evaluación de forma que cada evaluador
pueda familiarizarse con la herramienta, su estructura, intervenciones
y la escala de puntuación antes de comenzar a evaluar.
Una reunión de autoevaluación puede durar unas 2 horas dependiendo
del grado de preparación de la misma y de la facilidad de alcanzar
consensos sobre las puntuaciones entre los miembros del equipo de
autoevaluación. Para facilitar la conducción de la sesión y construir
consensos sobre las puntuaciones se recomienda que dos miembros del
equipo asuman dos roles importantes: facilitador o conductor y relator
o secretario de la sesión. Conocer las intervenciones previamente
y describir las actuaciones implementadas según los criterios de la
escala de puntuación facilita el consenso del equipo.
5. Escala de puntuación
La escala de puntuación de IEMAC tiene un rango de 0 a 100. Cada
intervención debe puntuarse en base a los siguientes criterios:
- Despliegue, entendido como profundidad y grado de implantación
de la intervención. Según la naturaleza de cada intervención, el
despliegue puede tener un significado diferente. En la mayoría de
las intervenciones, el despliegue se refiere a la cobertura de los
pacientes con las patologías reumatológicas objeto de evaluación o
de los profesionales implicados en el proceso asistencial. En otras
intervenciones, el despliegue se refiere al alcance de la intervención
en el ámbito de gestión que le corresponda.
- Existencia o no de un proceso de Evaluación sistemática y continuada
en el tiempo de los progresos y resultados de las
intervenciones puestas en práctica. La evaluación implica la
realización de mediciones periódicas y controles tanto del despliegue
como de los resultados obtenidos, así como su registro. La evaluación
sistemática y continuada será la base para el aprendizaje de la
organización, permitiendo la identificación, priorización, planificación
y puesta en práctica de acciones de mejora. Dado que en no
todas las intervenciones es posible realizar una evaluación “dura”,
en la práctica, para evaluar las intervenciones pueden utilizarse
diferentes diseños: desde estudios descriptivos, observaciones
directas, informes de expertos hasta ensayos clínicos aleatorizados,
utilizando información tanto cuantitativa como cualitativa.
- Existencia de un alto grado de Innovación, objetivado en que la
intervención es considerada una Buena Práctica de acuerdo a los
criterios de la Estrategia de Enfermedades Musculoesqueléticas del
Sistema Nacional de Salud o reconocimientos de categoría similar.
La escala es un continuo que permite posicionar el grado de desarrollo
de una organización con respecto a cada una de las intervenciones
definidas en IEMAC ERIMI. A pesar de ello, se ha dividido en 5 segmentos
para facilitar la asignación de la puntuación.
Primer segmento: Existen actuaciones aisladas o se está definiendo
la intervención (o el plan de acción de la intervención). El despliegue
(cobertura territorial, número de patologías, número de pacientes y/o
profesionales implicados) es limitado. Corresponde a experiencias piloto,
actuaciones puntuales con algún grupo de pacientes o intervenciones
que se encuentran en fase de diseño.
Segundo segmento: La intervención (o el plan de acción de la
intervención) se ha puesto en marcha aunque no se hayan evaluado
resultados. El despliegue alcanza a un 25% de los ámbitos relevantes. Se
puntuará aquí cuando los planes de acción se hayan puesto en marcha
en algunos centros o por algunos profesionales o en determinadas
consultas y para algunas ERIMI, con un despliegue en torno al 25%. En
este segmento no se exige que se haya realizado evaluación de resultados.
Tercer segmento: La intervención (o el plan de acción de la intervención)
se está desarrollando de forma sistemática. Se han evaluado resultados.
El despliegue alcanza al 50% de los ámbitos relevantes. Supone que la
intervención se está implantando de forma sistemática. Es decir, que
no se trata de experiencias aisladas o basadas exclusivamente en el
voluntarismo de unos pocos profesionales o de acciones desarrolladas
en el marco de un proyecto de investigación. La implantación de la
intervención abarca un número mayor de centros, de profesionales de
diferentes disciplinas y a un mayor número de ERIMI, con un despliegue
en torno al 50%. Además, ya se ha diseñado el sistema de evaluación y
se han evaluado resultados.
Cuarto segmento: La intervención (o el plan de acción de la
intervención) se ha evaluado sistemáticamente al menos durante 2
años. El despliegue alcanza a un 75% de los ámbitos relevantes. Este
segmento se utilizará cuando el plan de acción cuente con una trayectoria
de implantación en la práctica de, al menos, 2 años. El despliegue de las
intervenciones se sitúa en torno al 75% y en ellas intervienen un amplio
conjunto de profesionales, centros o consultas, según los casos. Estas
intervenciones se realizan en la práctica totalidad de las ERIMI. Las
intervenciones han podido ser evaluadas y el resultado de la evaluación
está permitiendo identificar innovaciones en la atención al paciente.
Quinto segmento: La intervención (o plan de acción de la intervención)
está integrada en el modelo de atención de la organización, alcanza un
despliegue superior al 85% y favorece la innovación. Este segmento se
reserva para las situaciones en las que la intervención está plenamente
integrada en la práctica asistencial y alcanza un despliegue en el conjunto
de la organización superior al 85%. La evaluación está orientada a la
mejora y a la innovación hacia nuevas intervenciones sustancialmente
diferentes, posiblemente de otra naturaleza o de nueva generación
tecnológica.
Es importante tener en cuenta que la herramienta ha sido desarrollada
bajo un criterio restrictivo, por lo que para posicionarse en un
determinado segmento hay que cumplir íntegramente los requisitos
contenidos en el segmento anterior.
6. Puntuación
La puntuación global IEMAC ERIMI corresponde a la suma de las
puntuaciones en cada una de las intervenciones. Oscila en un rango de
0 a 3.000 y ha sido diseñada para facilitar comparaciones evolutivas de
la organización.
A la hora de interpretar las puntuaciones ha de tenerse en cuenta que
lo habitual es comenzar con puntuaciones modestas. Es lógico que, a
medida que los profesionales se van familiarizando con los modelos de
atención a pacientes crónicos y con los elementos clave de su gestión,
se vayan introduciendo mejoras y las puntuaciones vayan aumentando.
No obstante, se ha documentado que, en ocasiones, no se comprende
totalmente el proceso de mejora hasta que se está inmerso en él, por
lo que podría ocurrir que en alguna evaluación la puntuación sea más
baja que en la evaluación previa, a pesar de haber introducido mejoras.
7. Periodicidad de evaluación
La implantación de intervenciones de mejora ante la cronicidad de una
organización sanitaria requiere un tiempo que puede variar en función
del tipo de intervención y de la propia organización.
En un primer momento, se recomienda que la organización se autoevalúe
con una periodicidad de un año y, en función de los niveles alcanzados y
del número, intensidad y tipo de intervenciones de mejora que se hayan
desarrollado, distanciar las autoevaluaciones. Las organizaciones más
avanzadas en el manejo del paciente con ERIMI requerirán plazos de
tiempo mayores para visualizar mejoras significativas.
8. Utilidades
La herramienta IEMAC ERIMI:
- Permite realizar el diagnóstico de una organización en relación al
grado de implantación de un modelo de excelencia de atención a las
personas con ERIMI, así como su evolución en el tiempo.
- Ofrece un mapa de intervenciones que conforman un modelo de
abordaje de la cronicidad, pudiendo ser utilizado como hoja de ruta
para la gestión del cambio por clínicos y gestores.
- Es un instrumento de mejora de la calidad al permitir la comparación/
benchmarking entre organizaciones similares.
- Facilita la orientación de procesos de planificación, de reasignación
de recursos y de cambios organizativos.
El proceso de autoevaluación con IEMAC ERIMI ofrece:
- La oportunidad de compartir experiencias y perspectivas entre el
equipo de profesionales que atienden a los pacientes con ERIMI.
- La identificación de fortalezas y áreas de mejora para avanzar en el
cambio de modelo de atención a dichos pacientes.
- Una puntuación en rango de 0 a 3.000, que posiciona a la
organización.
- Una posición relativa frente a organizaciones similares.
Ha de tenerse en cuenta que:
- Este instrumento mide las percepciones de los evaluadores sobre la
atención al paciente con ERIMI. Como ocurre con otros instrumentos
de autoevaluación, estas percepciones pueden estar influenciadas
por las motivaciones, expectativas y por la propia comprensión e
interpretación de las intervenciones por parte de los respondedores.
- Aunque este instrumento aborda múltiples dimensiones de mejora,
no pretende ser un plan integral de mejora de la atención a estos
pacientes. Aspectos fundamentales, como por ejemplo, los recursos
humanos, la financiación o los incentivos, sólo se abordan cuando
están relacionados con la mejora de la atención a pacientes crónicos.
- IEMAC ERIMI no ha sido diseñado para comparar organizaciones,
centros, servicios o prácticas asistenciales en base a la puntuación
agregada.
9. Evaluación a través de la web www.iemac.es
Hacer las evaluaciones de las organizaciones en la web, permite obtener
los siguientes informes:
- Informe de resultados de mi organización con totales para cada eje.
- Informe evolutivo de la organización a lo largo del tiempo.
- Informe de posición relativa (comparativo) de la organización respecto
a organizaciones similares.
La persona que cumplimente la evaluación en la web, deberá asegurarse
de que cuenta con la autorización del responsable de la organización
que se autoevalúe y de que la misma organización no ha cargado otra
evaluación en la web en los últimos tres meses.
Igualmente, se deberá especificar el tipo de organización (pública o
privada) y su ámbito de decisión.